Querida Familia Mariana:
Ya estamos en el mes de la solidaridad. Un mes que nos invita a salir de nosotros mismos para mirar al otro, al que está más cerca y al que está más distante de nosotros, e involucrarnos. El Papa Francisco dijo en una audiencia “Jesús continúa también hoy quitando el hambre, haciéndose presencia viva que da consuelo, y lo hace a través nuestro”, por lo que “el Evangelio nos invita a estar disponibles”. (29 julio, 2018). Tenemos muchas oportunidades de cultivar nuestra solidaridad, de ser la voz de Cristo y de María para tantos que viven sin esperanza, que están tristes, que necesitan ser escuchados. Podemos involucrarnos en la misión al hacer nuestra la invitación de Jesús y ayudar a quitar el hambre, el frío, el dolor y dar esperanza y alegrías con pequeños y grandes gestos solidarios.
Para las familias que se integran a nuestra comunidad, les contamos que como colegio realizamos distintas campañas durante el año, una fue la campaña de cuaresma en los meses pasados, y agradecemos de manera especial su ayuda.
La Colegiotón es una campaña que realizamos con el fin de ayudar a los distintos centros donde realizamos la acción social del colegio para pasar el frío del invierno y para proveer de víveres a familias que lo necesitan.
Los lugares donde llevaremos la ayuda son: el comedor Hogar de María, Jardín Pepeluche en Villa O´Higgins, la Casa de la mujer migrante, familias necesitadas, entre otros. Las necesidades siempre son múltiples y diversas.
A través de esta carta los invitamos a ser parte de esta Campaña de la solidaridad: “Colegiotón”, la que se llevará a cabo los días: 21, 22 y 23 de agosto; para que así puedan ir juntando ropa, toallas en buen estado, mantas, frazadas, útiles de aseo personal para mujeres; juguetes tipo rodados plásticos como triciclos o motos, etc. (jardín Infantil), y alimentos no perecibles .
La ayuda recibida será llevada a los distintos lugares el sábado 24 de agosto, queremos ir como comunidad a dejar nuestros aportes.
Confiamos que esto será una instancia para conversar en familia, para reflexionar sobre la importancia de crecer en el amor y en la generosidad. Que no sea simplemente dar lo que me sobra, o lo que me “tocó” llevar, sino que sea la mejor oportunidad para crecer como familia en comprendernos como seguidores de Cristo, donde el aporte de todos es importante. Que María nos ayude a implorar al Espíritu Santo y que Él nos encienda en el amor de Jesús.
Desde ya, contamos con su aporte
Pastoral Colegio Mariano de Schoenstatt