Los más pequeños de nuestra comunidad mariana realizaron la vivencia “Mi Familia un Regalo de Dios”. Cada alumno, en la capilla de nuestro colegio, recibió la imagen de su familia y fue acompañado por sus papás. ¡Qué importante es descubrir la imagen bondadosa del Padre Dios en nuestra vida!
La alegría era inmensa. Niños y niñas estaban felices por compartir con sus apoderados. Involucrar y apoyar a los padres, en su tarea insustituible de educar y acompañar la vida de sus hijos, es parte importante de nuestro proyecto educativo.
De la mano de María, caminamos juntos como familia – colegio. Las actividades pastorales nos impulsan a tener herramientas concretas y crecer en el amor a Dios. Esperamos que haya sido una vivencia muy significativa.